miércoles, 29 de febrero de 2012

¡Cuidado con prevaricar!

Escrito ayer, en nuestro sin par periódico local y localista:
  • En Canarias no hay justicia. No la hay para el periódico EL DÍA. No ocurre lo mismo para otras empresas o entes civiles.
  • Hay varios casos, como decimos. Por ejemplo, el de una magistrada, cuyo nombre no citamos por nuestro respeto a la Justicia y a quienes deben ejercerla, que dictó una sentencia contra EL DÍA en apenas 24 horas; es decir, casi sin tiempo a que concluyese la vista oral. Citamos este caso para que lo conozcan nuestros lectores y para que le sirva de conducto al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Canarias. Una sentencia dictada en menos de 24 horas, cuando tantas quejas hay sobre los retrasos de la Justicia. ¿Qué influyó en la jueza para que le pusiera la pistola en el pecho a José Rodríguez y lo obligase a rectificar una información sin tener por qué, ya que la noticia estaba redactada con palabras evangélicas?
  • Nos preguntamos si no merece ser expulsada de la Judicatura, como lo ha sido el juez Garzón por prevaricación, una jueza de Las Palmas, cuyo nombre tampoco citamos, que a nuestro juicio ha prevaricado tres veces. La primera vez que lo hizo fue al manifestar en un periódico de Las Palmas que José Rodríguez era un presunto delincuente al calificarlo como racista y xenófobo, influida, o aconsejada, creemos, por una periodista amiga suya. ¿Eso no es prevaricación opinar sobre alguien, y hasta sentenciarlo públicamente y con publicidad, sin haber sido juzgado? ¿No actuó así esta jueza a sabiendas de que estaba prevaricando? Esta jueza fue denunciada ante el CGPJ, que la absolvió por razones obvias de corporativismo.
  • La segunda prevaricación de esta magistrada, a nuestro entender, ha sido testificar en una demanda contra José Rodríguez Ramírez presentada por su compañero sentimental, en la que se le pedían 150.000 euros de indemnización al editor de EL DÍA por unos comentarios en los que no se cita a la persona. El juez ha reducido esta cantidad a 69.000 euros. Esperamos que en la correspondiente apelación quede reducida a nada o a su mínima expresión.
  • También prevaricó esta jueza al no inhibirse en una demanda presentada por el editor de EL DÍA contra Teresa Cárdenes, directora de La Provincia, por acusarlo de racista, xenófobo y, además, haber proferido insultos contra él. No solo absolvió a esta periodista; también condenó en costas a José Rodríguez. Habiendo sido denunciada previamente por Rodríguez Ramírez, esta juez no estaba facultada para enjuiciar esta demanda. Ha prevaricado. ¿No debería ser juzgada por el Tribunal Supremo y expulsada del cuerpo, como lo ha sido Baltasar Garzón?
Los insultos proferidos por Gary Baldi y que le han hecho merecedor de condena están a la vista de todos, así como las frases y comentarios que, asimismo, le han hecho acreedor del dudoso título de racista y xenófobo (sin paliativos, añade un servidor). Mueve a la compasión que nuestro insigne abuelete se queje de que, por una vez, la justicia funcione como Dios manda, y que la juez Sánchez Hierro le haya dado las suyas y las del pulpo en salva sea la parte, obligándole a rectificar lo que empecinada y evangélicamente había publicado sobre Angela Mena, y cuya veracidad nadia ha podido demostrar aún. Lo demás produce náuseas.

viernes, 17 de febrero de 2012

Ese hombre...

Leyendo lo de hoy, ya sabemos dónde y al dictado de quién, me ha dado por recordar una de las más célebres canciones de la tristemente fallecida Rocío Jurado, titulada Ese hombre, en la que se despachaba a gusto descubriendo los defectos de un gentleman en apariencia atractivo, afable y seguro de sí mismo. Si no la recuerdan, les recomiendo encarecidamente que le echen un vistazo aquí antes de seguir leyendo.

Casi nada el pollo, ¿verdad? Pues ahora lean la versión libre del tema que nos hace Gary Baldi, sólo que en esta ocasión El Hombre no es en absoluto anónimo:

Rivero es un político incompetente, maniobrero, inútil, nefasto, necio, torpe, inepto, incapaz, ignorante, inculto, simple, bruto, grosero, obtuso, nulo, memo, fatuo, corto de inteligencia, pueril, coactivo, opresor, insensible a las calamidades de su pueblo, despótico, tirano, arbitrario, injusto, abusador, vejatorio con el principal grupo de comunicación de Canarias, caprichoso, voluble, lacayo de los españoles, intolerante y muchos calificativos más que les ahorramos a nuestros lectores porque son harto conocidos, todos ellos referidos a su faceta de hombre público ya que en su vida privada no entramos para nada.

Es inevitable hacerse ciertas preguntas a propósito de la excusa a la que siempre recurre el mencey guanchófono: ¿cómo se puede ser necio, torpe, ignorante, inculto, grosero, bruto, memo, fatuo, pueril, corto de inteligencia, arbitrario, caprichoso e intolerante en la vida pública sin serlo también en la privada? Se podría decir de Rivero que es un presidente inepto, injusto, incompetente y/o incapaz sin atentar contra su imagen o su honor, pues son aspectos estrictamente imputables a su labor pública. ¡Y hasta es muy posible que sean, además, ciertos! Pero el resto de la traca va mucho más allá de la mera crítica política, por más que -torpe y puerilmente, por cierto- se pretenda disfrazarla como tal. Semejante lista de la compra, en la humilde opinión de quien escribe, es una agresión gratuita, chabacana e intolerable al presidente canario, más allá de sus virtudes y defectos, políticos o no, y transgrede ampliamente el derecho a la libertad de opinión. Por carantoñas mucho más lisonjeras, Federico Jiménez Losantos, un periodista de largo más mediático e influyente que nuestro insigne gallinazo, fue sentado por Alberto Ruiz-Gallardón en el banquillo y más tarde condenado por injurias graves. Treinta y ocho mil euracos de multa, más costas. Y al escribir esto, no puedo dejar de recordar al extinto chulón capicúa y marinconsón, ya desaparecido de los comentarios del periódico azul por arte y culpa de sesenta y nueve mil mortadelos (costas aparte), aún pendientes de apelación. Así que cabe preguntarse si la dimensión de la perreta con Paulino es pura inconsciencia o mera estupidez. He ahí el dilema.

¡Cuidado, abuelete! Cuidado con ese hombre...

jueves, 16 de febrero de 2012

La quinta columna paulinista

Si no tenía bastantes males que sobrellevar, ahora resulta que se cierne un nuevo e inquietante peligro sobre el octogenario gran mencey guanchófono de la avenida de Buenos Aires. Ni más ni menos que agentes encubiertos, al servicio de Paulino Rivero, cuya misión sería persuadirle para que cese en sus acometidas contra el mandatario sauzalero. ¿Paranoia? Juzguen:

Algunos lectores de EL DÍA nos han pedido, incluso por escrito, que aflojemos nuestros ataques contra Paulino Rivero. Respetamos mucho a nuestros seguidores, pero no es el caso. Esas personas dicen ser lectoras de nuestro periódico y aseguran que comparten nuestra línea editorial, pero en realidad son acólitos de Rivero; lacayos de un tirano político que les paga con dinero público los favores que le prestan. El políticamente despótico presidente del Gobierno regional es especialista en cultivar a sus amistades mediante el reparto de prebendas, utilizando para ello el dinero que no gasta en remediar los males de los canarios. Unos males, lo decíamos ayer, que ha creado él mismo con su torpeza e inutilidad como gobernante.

Esperamos que el contraespionaje garybaldiano desenmascare a estos nuevos y viles siervos del mal, a diferencia de lo que ocurrió con el siniestro Sanedrín de Vegueta, cuyos miembros aún siguen en el anonimato. Y ya puestos, ¿cómo sabe tanto de los modos y maneras de Paulino? ¿Qué ocurrió cuando, no hace tanto, ambos eran amigos y residentes en Santa Cruz?

miércoles, 15 de febrero de 2012

Moral periodística

Así habla hoy la compungida e indignada voz del pueblo oprimido:
  • Lejos de dimitir y desterrarse para siempre, persiste Paulino Rivero en mantenerse a toda costa en el poder. Para ello, de una forma descarada y utilizando el dinero que necesitan los niños para comer, subvenciona a un periódico canarión y a su hijuela en Tenerife con el fin de que canten diariamente sus logros. Y no solo ese dinero. También destina a tal fin los impuestos que pagan EL DÍA y todos los canarios.
  • Avergüenza leer esos periódicos que lo alaban por el descaro con que publican imágenes tanto suyas como de sus allegados, y a veces también familiares, por la única razón de que están subvencionados. ¿Cómo los subvenciona el Gobierno? Pues de muchas formas y recurriendo a muchos conceptos. Uno de ellos es el de la venta en bloque de ejemplares. Esos periódicos, adquiridos con el dinero de todos, se apilan luego en almacenes para venderlos al peso a los "chatarreros" del papel. Al final del proceso, la OJD los contabiliza -si no investiga bien este asunto de la venta en bloque, que sí lo hará, creemos- como periódicos vendidos en los kioskos para aparentar que están a la altura de EL DÍA tanto en ventas como en número de lectores, que es lo que pretende; pero el Estudio General de Medios no se dejará engañar, igual que las Oficinas de Difusión.
  • Lo peor del tinglado que ha montado Paulino Rivero para contrarrestar las críticas de EL DÍA -el único medio de comunicación que le canta las verdades y defiende la libertad de los canarios- es que lo sufraga con un dinero que debería atenuar los padecimientos de los parados y los hambrientos. Paro, hambre y miseria que han creado él mismo, con su mala gestión, su gobierno y CC.
Ya ven: Paulino Rivero es un malage porque subvenciona a otros. Cuando el subvencionado eras tú, cuando trincabas dineros públicos en forma de generosas subvenciones y dádivas a cambio de empalagosos cánticos y loas, entre otros, al mismísimo Paulino, cuando los gerifaltes de la hoy denostada Coalición Canaria adornaban con su prosa y verso las columnas de opinión de tus páginas, entonces no te acordabas de las penurias de los niños o los parados. ¿Verdad que no? Claro que estas islas no eran una vil colonia, tú ni te arrimabas a los Cubillo o Concepción, ni mucho menos te cuestionabas la profunda españolidad de este terruño, exaltando la grandeza del Ejército y la Benemérita (hoy fuerzas coloniales), y cantabas tu profunda devoción por la Virgen de Candelaria (¡si Achamán te oyese!). Claro que temporibus illis no había hambre porque el ladrillo y el lorenzo funcionaban a quemarropa para solaz de tus amiguetes, y Paulino era un político serio, honesto y trabajador, pese a haber pactado también con los entonces perdedores.

En resumen: si es para mí, vale, y me lo merezco porque soy el más guay. Pero si es para otros, malo. ¡Si hasta conocerás bien las triquiñuelas del negocio, que lo ilustras con pelos y señales! Todo un detallazo. Muy bien, esperaremos el veredicto del EGM, ése según el cual todos son líderes de ventas y todos aventajan a sus más directos competidores. Y a ver qué pasa. Mientras, sigue así, cubriéndote de gloria. Maestro.

martes, 7 de febrero de 2012

Pinchito moruno-canario

Espectacular pirueta la que propone el inefable Gary Baldi de la mano de su fiel colaborador en temas marítimohistóricofilosóficopolíticodeuteronómicos (all-in-one) Ramón Moreno Castilla. Después de meses intentando asustarnos con las ansias expansionistas del taimado vecino marroquí (que, según El Día, tiene patente de corso para anexionarnos sin más), ahora se nos descuelgan con la idea de convertir a Canarias en el Puerto Rico de Marruecos como vía alternativa para la ansiada y añorada soberanía de la patria nacional-guanchófona. ¡Bang! ¿No lo creen? Lean al señor Moreno:
  • (...) ¿No sería bueno para Canarias ser un “Estado Libre Asociado” a Marruecos? Con esta fórmula, ciertamente novedosa, y que dará escalofríos a más de uno, es seguro que ya no habría problemas con Marruecos: ni por el trazado de la mediana, ya que tendríamos aguas compartidas; ni por los yacimientos de hidrocarburos localizados en aguas adyacentes, que serían explotados conjuntamente con un reparto equitativo de beneficios; ni por el turismo, dado que podríamos ofertar el paquete “Continente e Islas”; ni por la agricultura, cuyos productos son de mayor calidad y a mejores precios que los que nos cuela España en este mercado cautivo; y numerosas ventajas más, que sería prolijo enumerar ahora. Seríamos, en definitiva, dos países amigos, no competitivos sino complementarios, con intereses comunes y un futuro prometedor. “Status” que podría ser extrapolable al Sáhara, que sería entonces un “Estado Libre Asociado” a Marruecos, con la variante de “soberanía compartida”, lo que constituiría todo un aldabonazo en las relaciones supranacionales y la diplomacia internacional; y daría un giro de 180 grados al conflicto, con una solución imaginativa, integradora, beneficiosa para las partes y, sobre todo, pacífica. Inclusive, ese modelo de relación-asociación interestatal podría ser asumido por la misma ONU, dejando sin efecto la labor de la inoperante MINURSO.
A eso llamo yo hacer patria, ¡sí señor!: poner las islas en manos de un país con el que nos une poco más que la vecindad geográfica y con el que existen importantísimas diferencias políticas, culturales, idiomáticas, y sociales (entre otras). Salir de un estado democrático y de derecho para echarse en brazos de una monarquía cuasiabsoluta y semimedieval, donde la religión islámica no se discute (¡señoras, atención!), donde la competitividad de los productos agrícolas se justifica, entre otras cosas, por la mano de obra barata y donde, por decir algo, el uso de productos agroquímicos prohibidos en el mundo desarrollado se mira con cierta indulgencia. Y pretendiendo que el trato con el vecino moro sería de igual a igual. Como Puerto Rico y Estados Unidos: ¡calcado! Lo siento señor Moro, perdón, quería decir Moreno (una cosa lleva a la otra, como sin duda sabrá por su latín, que no por su árabe o tamazigh), no puedo estar en mayor desacuerdo. Tanto como, presumo, lo estarán los ciudadanos saharahuis ante su oferta. Y casi tanto como parece estarlo su mentor y protector:
  • Este planteamiento de Ramón Moreno lo vemos como un acierto pero nos reservamos expresar nuestra última opinión mientras meditamos, que esto es muy sano. Desde luego, esta es una solución para que Canarias tenga su estado y sus aguas, así como su Hacienda, su Constitución y su Justicia propias. Muchos pondrán el grito en el cielo porque piensan que Marruecos es África negra. Y aunque así fuera, los habitantes del África negra son seres humanos. Marruecos es un país que está a la cabeza de la civilización en el mundo actual, y prácticamente pertenece al occidente europeo, aunque esté en África. Se alarmarán algunos ante la posibilidad de unirnos a un país que no es europeo, pero la realidad es que no somos europeos. En cualquier caso, como decíamos antes, nos reservamos nuestra opinión hasta que llegue el momento.
Tan nervioso le ha puesto que parece confundir Marruecos con Europa, Canarias con el Africa negra (a cuyos habitantes, graciosamente, otorga la condición de seres humanos, y no de portadores del Ébola), o a los vecinos con el Occidente civilizado. ¡Toma Moreno! (Cuervo Rockefeller dixit).

¿Pues sabe lo que le digo? Que si convertir a Canarias en un pinchito moruno, en manos y a merced de su graciosa majestad Mohamed VI es lo mejor que pueden ofrecer, entonces (¡por Achamán!), lo tengo claro: no, gracias. Perdón: ¡Choukrane!

(P.D.: La cosa tiene enjundia. Recordemos que no hace mucho, a Gary Baldi se le pusieron sus ralos cabellos como escarpias al ver a Paulino Rivero y a Domingo Berriel vestidos con chilabas durante su reciente visita al país vecino. Hablaba entonces de vergüenza y de inmenso bochorno. Al hilo de ello, otras plumas ilustres del diario azul afirmaban que Marruecos no demuestra sintonizar demasiado con los intereses de Canarias, mientras que el ínclito Ricardo Peytaví comentaba, entre resignado y cínico, que se habían visto cosas peores que vestir con la típica prenda marroquí. Y ahora llega el amigo Moreno para decir que Canarias se asocie con Marruecos, sin que nadie se lo reproche. Vivir para leer.)

jueves, 2 de febrero de 2012

La simplonada de hoy

El gran apóstol de la libertad de esta tierra bananera oprimida siempre encuentra argumentos para justificar sus alegatos, no importa lo pueriles y disparatados que puedan ser. Lo de hoy va de petróleo, en relación a las recientes declaraciones de nuestro flamante ministro Soria acerca de este preciado recurso y de su posible existencia junto a las costas canarias orientales. Dice así la autoproclamada voz del pueblo:

Ni siquiera si Marruecos le permite a España que explote ese petróleo está claro que los beneficios producidos fuesen para Canarias. Más bien está claro que no se quedarían en las Islas. De nuevo serviría para llenar las arcas españolas en detrimento nuestro. Lo contaba hace unos días Jorge Dorta, economista y patriota canario, en un artículo publicado por EL DÍA. Los noruegos viven como uno de los países más ricos del mundo gracias al petróleo del Mar del Norte porque es un recurso del que se benefician directamente. En cambio los escoceses, que también extraen petróleo de sus costas, siguen en la pobreza porque los beneficios van a las arcas del Reino Unido. ¿Quién puede demostrarnos que en Canarias no va a ocurrir exactamente lo mismo?

Mireusté, yo no soy adivino. Ni tampoco economista, como el señor Dorta. Pero la simpleza del argumento empleado (que es más bien una simplonada) puede ponerse de manifiesto tras sólo cinco minutos de navegación por Internet y echar unas cuantas sumas y restas.
  • Resulta que la población noruega no llega a cinco millones de personas, mientras que hay censados más de sesenta millones de británicos. Incluyendo a los escoceses, claro.
  • Resulta que Noruega dispone de abundantes reservas de energía hidroeléctrica, limpia como una patena, gracias a su clima y orografía; reservas de las que el Reino Unido carece por completo o no explota. Por tanto, la dependencia del petróleo producido en ambos países es altamente desigual, máxime si se tiene en cuenta que la Pérfida Albión es el duodécimo país con mayor consumo energético del mundo mundial.
  • Resulta que las reservas probadas de petróleo del Mar del Norte correspondientes a Noruega casi doblan a las de sus vecinos británicos (6800 millones de barriles frente a 3600 millones de barriles).
  • Resulta de todo lo anterior, que mientras Noruega puede destinar la mayor parte de su producción petrolífera a la exportación (ocupa el tercer lugar de la lista detrás de Rusia y Arabia Saudí), en el Reino Unido la mayor parte de la producción se va en consumo propio para satisfacer su insaciable demanda, que también deglute cantidades ingentes de gas natural y energía nuclear, justo lo contrario que los antiguos vikingos del norte.
  • En definitiva, y en virtud de su baja ensidad de población y del uso racional de sus recursos, así como de su alto nivel de educación, resulta que Noruega ocupa el segundo lugar en PIB del mundo, sólo superada por Luxemburgo, y resulta que sus indicadores macroeconómicos son la envidia del orbe. La situación del Reino Unido (no digamos la de España o Canarias) está lejos, lejísimos de la de Noruega. Punto final.
Así que venga, una vez más: ¡Pepito, castigado a la pared por no saber hacer los deberes! Y tú, Jorgito: no te rías, que también te he visto el plumero.